martes, 11 de noviembre de 2014

Sculpture by the sea (ii)

He dejado de tomar café, pero no cerveza, aunque sea rara!
He dejado de tomar café. Con lo buenísimo que está por estos lares. Pero es que me altera demasiado. Incluso el descafeinado. Me tomo un café con leche descafeinado a las 10 de la mañana y pueden ser las 3 de la noche y estoy con los ojos como platos. Dicen que es genético. Puede ser. Así que lo he dejado. Mal que me pese. Desde el viernes pasado. Y ahora estoy que me falta un poquito de energía, esa chispita que te da la cafeína. Pero bueno, al menos duermo, que no podía ser. Higiene básica del sueño. También es verdad que estaba muy nerviosa por el resultado de la beca a la que me presenté... y que no me han dado. Oh! Pero no estoy triste (no es como cuando no me dieron la Sara Borrell que me cabreó sobremanera). Esta vez a los 10 minutos estaba sonriendo, sin quererlo. Son sentimientos agridulces: por un lado no me veía haciendo ese proyecto por 3 años, ya sabéis que no soy muy pro e-Salud, que fue lo que pedí (aunque teóricamente reconozco los beneficios y sé que es el futuro, pero no me apasiona), así que me quité un peso de encima. Pero  siempre duelen los rechazos y que te digan "mira nena, no eres suficientemente buena". Era difícil. Sólo 200 becas para toda Australia y todas las disciplinas (sí, competía con físicos, químicos, literatos, antropólogos, etc...) y no miran a los de salud con buenos ojos, porque salud ya tiene sus propias becas ( a las que no me puedo presentar por no ser australiana :S). En fin! se intentó y fue no. Que hi farem. Lo bueno de esto es que uno se replantea las cosas y se ponen en perspectiva. La consecuencia a corto plazo: hemos vuelto a aprovechar los fines de semana (y las tardes que estamos juntos), que igual en 9 meses estamos otra vez por allí, y hay que disfrutar esta ciudad!


El sábado nos fuimos a Bondi a ver el Scuplture by the Sea. El año pasado ya estuvimos y nos gustó mucho, así que repetimos. El camino costal que va de Bondi a Tamarama se llena de esculturas y es un paseo chulísimo. Nosotros lo hicimos al atardecer, cuando ya el sol no picaba y hacía fresquito (que el año pasado fuimos al mediodía, con un sol del quince, y aquí Jordi AKA nomegustaelsol, estuvo refunfuñando todo el rato). Estuvo muy bien. En cuanto a las esculturas, pues hay de todo! Algunas muy chulas (como las que os ponemos en las fotos) y otras más petardas. A mi me gustaron mucho las hormigas de papel maché ( de Janaki Lele), los houselight gatekeepers (Kimie Kitamura) que ya habíamos visto en el Hidden del año pasado, y unas que eran interactivas (Linda Matthews): te subías en un circulo donde había imprimida una foto, y caminabas alrededor. La foto se reflejaba en un cilindro y daba la sensación de ser 3D. Fue divertido (mirad la foto y lo entenderéis).


Qué graciosas las hormigas!!!

Hubieron otras esculturas que también nos gustaron. Pero de esas no apunté el nombre. Aquí tenéis una pequeña selección, hay muchas más, casi todas con su encanto. Pensad que hay más de 100 esculturas, así que es imposible ponerlas todas. Hay algunas muy locas: como la de los bebés gigantes o la sartén en la playa de Tamarama, y otras que son bonitas, como los barcos, el aro, o esas casas extrañas. Una de las cosas chulas es que hay muchas cosas hechas con material reciclado. De todos modos, lo más increíble es la cantidad de gente que siempre hay en estos sitios. Es genial.

A freírse en la sartén


¿Habéis visto que pechá de gente?
Y el domingo seguimos en la línea de hay que hacer cosas! Así que nos acercamos a Newtown, donde se celebrara un festival: música en directo, puestecitos, comida, juegos para niños, reciclaje, etc...Estaba patrocinado por el vecindario y solo te pedían una donación para entrar. Estaba a reventar! Nos entró un poco el pánico, y a pesar de que la música y el ambiente era muy chulo, no aguantamos más de una hora. Eso sí, como estábamos por allí pues nos fuimos al Hotel Newtown (como nos gusta ese bar) a cervecear y tomar patatas. Y de vuelta, pues como era el 9-N nos acercamos a votar. Y descubrimos que la Oficina de Acció de la Generalitat está al lado de casa. Al final yo no pude votar porque se necesitaba el DNI, y no lo llevaba encima (en algún sitio estará :S). Pero Jordi sí que votó y bien contento que estaba ( a mi me daba un poco igual, que me sale la vena bakuniana en estos casos, y ni dios, ni patria, ni amo). Que ya sé que, el anarquismo, si uno se para a pensar igual no es la mejor solución, pero vaya, en teoría resulta tan atractivo, aunque en mi día a día haya veces que me sorprenda pidiendo a algún dios que me ayude, echando demasiado de menos Barcelona, y pensando que es "más tranquilo" tener jefe, que ser jefa. Si es que me falta actitud para todo.

Y poca cosa más por esta semana: mucho trabajo, demasiado. Pero ya más o menos me he organizado y creo que podré hacerlo todo. Noviembre va a ser tremendo, pero bueno, pasado noviembre muchas cosas se terminan (revisiones, clases) así que empiezo a ver la luz. He conocido a gente muy interesante (Kerim Munir, Jim Harris) que aunque trabajan en temas que no me interesan demasiado (discapacidad intelectual) son expertos en ese área y, de todo  (o de casi todo) se aprende algo.

Ah! y viernes Jordi conoció, por fin, a la gente de la uni. Se vino a hacer un cerveza con nosotros, que para variar, se alargó más de lo previsto. Pero es que tenía que ahogar las penas en alcohol, cualquier excusa es buena. Y que mejor forma que hacerlo que entre amigos, aunque no seáis vosotrxs.

Y así se puso la tarde el sábado. Foto de libro de religión total " Dios te ama". Pero no deja de ser bonita, cursi, pero bonita.





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